Las corredurías de seguros han ido ganando terreno en la confianza del público, tal y como refleja el reciente estudio realizado por Aegon. Según el ‘I Informe del Corredor de Seguros en España: perspectivas, digitalización y retos’, un impresionante 53% de la población mantiene una percepción favorable hacia estas entidades. Este dato pone de manifiesto la creciente apreciación por los servicios de mediación en seguros, que facilitan la elección de coberturas ajustadas a las necesidades individuales.

El análisis de Aegon desvela que existe un significativo margen de crecimiento para las corredurías, dado que un 40,8% de los encuestados se sitúa en una posición neutral. Esta neutralidad indica un desconocimiento generalizado de los beneficios que ofrece la mediación de seguros, lo que sugiere un vasto mercado potencial aún por explorar.

En lo que respecta a las preferencias de los clientes al momento de seleccionar un mediador, un 26,8% valora especialmente el asesoramiento personalizado que pueden recibir. Este asesoramiento se centra en la identificación de productos y coberturas que se alineen de manera óptima con sus circunstancias personales, aprovechando el profundo conocimiento del sector por parte del corredor. Por otro lado, un 26,3% de los clientes busca principalmente obtener ofertas competitivas a través de la mediación, lo que subraya la importancia de la capacidad de negociación de las corredurías.

Sin embargo, existe una discrepancia notable entre la percepción de los corredores sobre el valor que aportan y la visión de sus clientes. Los mediadores ponen en relieve la importancia del servicio postventa, el cual consideran su mayor aporte, seguido de la intermediación entre clientes y aseguradoras, y finalmente, el asesoramiento en la selección de pólizas y coberturas.

El estudio también destaca la calidad del servicio como el factor más valorado por los corredores de seguros, seguido de la calidad de los productos ofrecidos y la eficiencia en los procesos. Estos elementos son cruciales para mantener una relación sólida y duradera con los clientes.

En cuanto a la digitalización, el sector de las corredurías de seguros muestra un notable avance. El informe indica que la madurez digital, definida por el grado de adopción y adaptación de tecnologías avanzadas, alcanza una puntuación promedio de 7,22 sobre 10. Este nivel de digitalización implica una adaptación efectiva a las herramientas de gestión de datos, ciberseguridad y plataformas de comunicación, lo que facilita una operativa más ágil y segura.

No obstante, se observa que el grado de conectividad varía significativamente entre las corredurías, particularmente en función de su tamaño y estructura organizativa. Las corredurías individuales o pequeñas presentan niveles inferiores de conectividad en comparación con las grandes empresas o aquellas con forma jurídica, lo que sugiere una oportunidad de mejora en este aspecto.

El informe concluye que existe una correlación directa entre el volumen de primas gestionadas y el nivel de digitalización. Las corredurías que manejan volúmenes más altos de primas tienden a mostrar mayores niveles de madurez y conectividad digital, lo que refleja la importancia de la inversión en tecnología para el crecimiento y la eficiencia del negocio.

En resumen, las corredurías de seguros en España están experimentando un periodo de valoración positiva por parte de la población, respaldado por un sólido asesoramiento, ofertas competitivas y una notable adaptación digital. Sin embargo, el potencial de crecimiento sigue siendo amplio, especialmente en la mejora de la conectividad y en la ampliación del conocimiento sobre los beneficios de la mediación de seguros entre la población.